Chobojos

Ajena

 

Ajena,

me gustan tus ojos serenos

tus labios de media noche

tu rostro pegado a mi alma

como la noche al cielo

como el cielo al día

como el día en que te quiero.

 

El lazo a ti es tan frágil

pero instantáneo

Me gusta sentirte en mi miedo

de no tocarte y de tocarte

Me gusta sentirte como un milenio

cuando te pienso en amor.

 

Ajena de mi silencio

te sigo segundo a segundo

idea tras idea te vas haciendo historia

en las líneas de mi piel

destilando en minutos

un murmullo hacia tu cuerpo.

 

No me sabía solo hasta ti

No me sabía la soledad hasta que tiñó el deseo

y no sabes cuanto deseo

hacerle el amor a tu mente y a tu cuerpo

 

De cuando en cuando

desde hace un mes te deletreo

Entre mis dedos te voy leyendo

desde la “A” hasta el te quiero

De la Luna a ti no he podido cambiarle la página al deseo

y no sabes cuanto deseo

hacerle el amor a tu mente y a tu cuerpo.

 

Ajena,

Los ecos de la noche

no se vacían de tus ojos

Las sombras que me habitan

se llenan de tus hombros

mi luna de tu risa

mi sol de tu mirada

 

y el mar con mi deseo

y no sabes cuanto deseo

hacerle el amor a tu mente y a tu cuerpo.

 

Te necesito, sé,  porque te quiero

y no concibo amándote al vacío

Nunca he soñado amarte princesa

sin tocar tu aliento

sin tomar tus manos

ni beber de tu boca lo que presiento

 

Ajena de todo el mundo

te revives en mi sueño

Como a hurtadillas te amo un poco

entre el sueño

entre cada vez que te miro

entre cada vez que te siento

y no sabes cuanto quiero ajena

amarte un mucho cada que plazca

con el placer de amarte tierno

sin hurtarle viento al cielo.

 

Te siento ajena de otros besos

y desde ti mis besos son ajenos

de otros labios

Que importan Ajena los extranjeros

cuando este amor se vuelve inmenso.

 

Du-Fer

 

Atte: Du-Fer