Por Juan Cervera Sanchís
Contra las calamidades de la realidad, el sueño. Contra el sueño y sus naufragios estar y estar más despierto. Todos los días acaban sin remedio anocheciendo. Todas las noches derivan en amaneceres ciertos. Si unos mueren y otros nacen, ¿qué es lo que está sucediendo? ¿A quién ves? Dime, ¿a quién ves cuando te ves al espejo? En este juego de imágenes yo me imagino estos versos que tú imaginas e imprimes en la página del viento. Frente al mar invento un río y, frente a mi sombra, invento que es mi sombra la que inventa la quimera de mi cuerpo. Si el espacio es una herida, ¿qué arma mortal es el tiempo? Aspiremos sólo al Limbo, pues lo demás es desierto.México D. F., julio 2008