
-Mamá, mamá… ¡mi hermanito se hizo caca!
-Cámbiale el pañal.
-No, mami, se cayó de la azotea.
-Mamá, mamá, en el colegio me llaman cabezón.
-¿Y no les pegas?
-Lo intento, pero corren y se meten por calles estrechas.
-Mamá, mamá, en el colegio me llaman maricón.
-¿Y tú, que haces? ¿Te quedas callado?
-No mami, les pego con mi bolsita.
-Mamá, mamá, no me cae bien el abuelito.
-¡Cállate y sigue comiendo!