La picaresca de nuestro país, desde el candor hasta el doble sentido, está presente en todas partes: en las estrofas de una canción, en los azulejos de la cantina, en las puertas de los sanitarios, en los camiones y autobuses, en la voz y en la memoria de todos.
Alonso Marroquín Ibarra
Insólito
Un chivo pegó un reparo
y en el aire se detuvo.
Hay chivos que tienen madre;
pero éste ni madre tuvo.
Solución
Y si los cuernos de un chivo
alumbrasen como la luna.
¡Qué fortuna!
Sería un portento
tener en cada casa
un chivo dentro.
Felicidad
Un pajarito volando
fue a meterse en un convento.
¡Qué alegres viven las monjas
con el pajarito dentro!
Conveniencia
Juana tiene dos hermanos,
uno grande y uno chico.
A mí no me gusta el grande,
pero sí me pasa el chico.
En los sanitarios de una cantina
Inútil cagar de aguilita. Hay ladillas voladoras.
Letrero en la estación del Ferrocarril
Prohibido hacer sus necesidades cuando el tren esté en la estación.
Atentamente: La Empresa
La respuesta de un pasajero
Me causa risa y sorpresa
este anuncio estrafalario;
pues debe saber La Empresa
que el culo, no tiene horario.
Letreros clásicos de camión
Me la paso entre las curvas y los hoyos.
Mi novia ya no es Virginia.
Si no vuelvo, lo bautizas.